La compra de un camping requiere previamente un estudio en profundidad de las posibles fuentes de financiación. Autofinanciación, préstamos bancarios, acuerdos legales, estos son los principales elementos de información para comprender mejor las posibilidades de financiar la compra de un camping.
Comprar un camping: ¿títulos o activos operativos?
Antes de estudiar las características de financiación de la compra de un camping, es necesario determinar si se desean adquirir los valores o sólo los activos de la empresa que explota el camping.
En el primer caso, se trata de adquirir la totalidad de la empresa operadora, lo que implica también adquirir sus deudas.
En el segundo caso, implica comprar sólo lo que posee, en caso contrario sus activos tangibles (edificios, equipos) y activos intangibles (bienes).
Lógicamente, los bancos prefieren financiar la adquisición de activos antes que la adquisición de valores. Esta opción permite constituir una hipoteca sobre el terreno y así ofrecer una sólida garantía.
La adquisición de títulos, por su parte, tiene la ventaja de ser menos costosa para el comprador. Sin embargo, la revalorización de las deudas complica la operación y los bancos se muestran más reacios a financiar este tipo de compras ante la ausencia de garantías significativas.
Comprar un camping: la importancia de la aportación
La aportación personal del comprador es de primordial importancia para el cedente: por debajo de una determinada cantidad de aportación personal, este último puede considerar que el comprador no podrá rentabilizar su inversión y no correrá ningún riesgo de perder tiempo. iniciando negociaciones.
En los últimos años, la demanda ha aumentado y comprar un camping se ha convertido en una inversión muy popular. Para ser elegido, se requiere, por tanto, la aportación de un capital mínimo que hoy asciende de media a entre el 40% y el 45% del precio total de la adquisición.
Este porcentaje puede variar en función del tamaño de la parcela: en el caso de campings pequeños, se estima que la rentabilidad generada dificultará la devolución del préstamo. Por tanto, la contribución solicitada puede ser superior. Por el contrario, para la compra de campings más rentables que generen un volumen de negocios superior a 500.000 euros, los vendedores podrán reclamar una contribución ligeramente inferior.
Dependiendo del perfil del comprador, su nivel de experiencia, el plan de negocio y la viabilidad del proyecto, el banco también puede requerir una aportación más o menos importante. Sin embargo, se estima que por debajo de los 300.000 o 400.000 euros de aportación, es difícil imaginar hacerse cargo de un camping para lograr un buen equilibrio financiero. Por tanto, la aportación personal es un criterio importante para poder financiar la compra de un camping.
Fuentes de financiación para la compra de camping
Para comprar un camping, el crédito bancario sigue siendo la solución de financiación más común. Dependiendo del tipo de adquisición, la duración del préstamo varía.
Como parte de la compra de activos, el préstamo para la adquisición de un negocio simple se realiza a 7 años.
En caso contrario, la adquisición se puede realizar de forma global (negocio + terreno) o separando el terreno de la empresa operadora (creación de un LIC del terreno). En el segundo caso, la aportación personal deberá autofinanciar la adquisición del negocio y el préstamo bancario financiará la adquisición del local.
En ambos casos, la duración del préstamo será de 15 años.
La adquisición de valores, por su parte, generalmente implica préstamos con una duración de 7 años. Sin embargo, no es raro poder negociar vencimientos de hasta 10 a 12 años.
Hay que señalar también que los bancos no son los únicos que pueden financiar la compra de un camping y que un comprador también puede recurrir a fondos de inversión regionales o a inversores privados, en particular empresas de capital riesgo.
Sin embargo, los préstamos bancarios son generalmente menos costosos que la financiación de este tipo de organizaciones.